Continuamos nuestro estudio de sistemas decorativos que se superponen a nuevas o existentes edificaciones.
El módulo que presentamos tiene como origen el ritmo armónico y la regularidad estructural. La idea modular, una vez más, intenta minimizar costes y simplificar el sistema constructivo utilizando formas estructurales estándar que pueden ser fabricadas y colocadas fácilmente.
Hemos obtenido un diseño cuyo principio organizativo principal es la simetría formal. Esta idea ofrece varias ventajas muy importantes: es escalable, como puede apreciarse en las imágenes, de esta forma diferentes tamaños del mismo módulo permiten la apertura de huecos en la fachada en aquellos lugares donde sea necesario. Tanto si el edificio a recubrir se encuentra previamente construido o no, los huecos para ventanas en la fachada dejan de ser un problema al poder adaptarse las dimensiones de las piezas que conforman la fachada a las medidas del edificio.
El módulo puede sobresalir de la edificación existente permitiendo ocultar instalaciones o cambiar la estética.
Las esquinas, de tan complicada solución en este tipo de revestimientos, queda también elegantemente solucionada en este diseño.
Los módulos pueden ser fabricados para caber en contenedores de transporte a la vez que mantienen las dimensiones óptimas para ser colocados cubriendo uniformemente muros o techos.
